El método que lleva el nombre de su creadora en honor, propone desde la perspectiva del desarrollo natural del niño, la evolución y el progreso de sus habilidades a un ritmo personalizado, si bien resulta todo un éxito al aplicarse en edades tempranas cuando el niño no se encuentra aún "contaminado socialmente", el trabajo logrado por medio de este método se destruye al integrar al niño a un ambiete escolar regular donde es prácticamente imposible darle seguimiento ; esto debido a que ni los padres ni la sociedad se escuentran preparados para atender las necesidades que los estudiantes bajo este perfil de formacion requieren, una de ellas y principalmente la más importante es dejar al niño en libertad, desgraciadamente vivimos dentro de una sociedad opresora que tiene por modelo una familia controladora, donde constantemente se reprime al individuo acerca de sus acciones e incluso pensamientos, viéndolo desde una perspctiva moralista.
La idea de una educación por medio del método Montessori no se encuentra del todo desfasado del ideal de la educación, al contrario como los resultados han reflejado , puede resultar en estudiantes con un alto potencial de desarrollo, respeto , tolerancia , individualidad y sobre todo con un alto grado de seguridad.
El método Montessori al igual que la reciente corriente educativa conocida como constructivismo, comparten una problemática muy similar, en ambas los estudiantes se pierden entre la discontinuidad, es decir, en el caso Montessori los alumnos fracasan por no seguir escolarmente bajo ese método salvo en en niveles básicos, en el constructivismo donde el alumno juega un rol pasivo no sabe como actuar ante el cambio de rol . Al llegar el constructivismo e invertir los roles el resultado es que los alumnos no se encuentran preparados para trabajar bajo ese método , en el Montessori los alumnos no están preparados para lidear con la escuela regular.
Utópicamente , pero como única medida de aseguramiento en el éxito de cualquiera de estos métodos es " empezar por el principio" , comenzar a deshenredar el hilo por la punta. Esto es empezar de cero y partir desde los comienzos educativos y darle seguimiento a través de todo el proceso educativo, hasta que cuente con la suficiente madurez para integrarse a cualquier método.